Al parecer la cosa empezó con el envío de sms más o menos eróticos (dependiendo del gusto del protagonista) a sus parejas. El objetivo del mismo era dispar: ligar, mejorar la relación sexual de una pareja que había ido descuidando este asunto o, simplemente, la diversión. Obviamente el contenido de los mensajes era fundamentalmente texto y quedaba almacenado en los móviles como tal.
El Sexting empezó a cambiar con la entrada en escena de los teléfonos de última generación, los famosos smartphones, iphones, androids, etc. Como ya sabemos, estos aparatos nos permiten enviar todo tipo de contenidos de texto, audio, imagen y vídeo en unos instantes tanto a otro terminal como a las redes sociales.
A partir de aquí la cosa se desbocó un poco y muchas personas empezaron a hacer uso de sus móviles para enviar fotos eróticas, vídeos amateur y mensajes subiditos de tono a sus parejas. Para ayudar a la extensión del Sexting se conoció que muchos actores de Hollywood lo practicaban con asiduidad.
Los problemas empezaron cuando algunas de las fotos y mensajes llegaron a personas indeseadas, ya sea porque por error se enviaban al destinatario equivocado o porque el mismo decidía hacer públicas esas imágenes o vídeos por despecho o venganza o, directamente, porque algún hacker había conseguido entrar en los móviles y llevarse los contenidos privados.
Vamos a poneros un par de consejos de como puede el Sexting ayudarnos en nuestra relación de pareja:
- Aseguraos de que en vuestros móviles no está activada la subida automática de imágenes a servicios en la nube, online como Google+, Instagram, Dropbox y demás. Y si lo hacéis, comprobad que se suben a carpetas privadas a las que el resto no tiene acceso.
- Utilizar aplicaciones específicas para el Sexting. Estas aplicaciones borran las imágenes transcurridos unos minutos y se necesita tenerlas instaladas para que pueden verse las mismas